¿Cuál es la acusación contra el exvicepresidente de Ecuador, Jorge Glas, detenido este viernes?

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Jorge Glas es un político ecuatoriano que fue vicepresidente de Ecuador desde 2013 hasta 2017. Se desempeñó como vicepresidente durante los mandatos de los presidentes Rafael Correa y Lenín Moreno. Antes de su vicepresidencia, ocupó varios cargos ministeriales. Enfrenta una serie de acusaciones y condenas por corrupción, incluyendo asociación ilícita y soborno, principalmente relacionadas con el escándalo de Odebrecht. Su arresto e involucramiento en casos judiciales significativos han generado gran atención tanto en Ecuador como a nivel internacional.

El político fue arrestado en la embajada de México en Quito, la capital ecuatoriana, donde había solicitado asilo político a las autoridades competentes.

Jorge Glas, exvicepresidente de Ecuador, fue detenido este viernes en la embajada mexicana en Quito, luego de haber solicitado asilo en diciembre de 2023, alegando ser víctima de persecución política por parte de las autoridades judiciales de su país, según afirmó su abogado. La Fiscalía ecuatoriana lo acusa de peculado.

Antes de su arresto, el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, había declarado que su gobierno intentaría permitir la entrada de Glas en territorio mexicano, citando el derecho sagrado al asilo. Sin embargo, después del arresto, el presidente mexicano anunció la ruptura de relaciones diplomáticas con Ecuador.

Glas, quien sirvió durante los mandatos de Rafael Correa y Lenín Moreno, fue condenado por asociación ilícita en 2017 y soborno agravado en 2020, en el contexto del escándalo de “la trama Odebrecht”, recibiendo penas de seis y ocho años de prisión, respectivamente. En noviembre de 2022, fue liberado después de un recurso de hábeas corpus presentado por su abogado, concediéndole libertad provisional debido al cumplimiento parcial de una pena de cuatro años y medio de prisión.

Estos son los casos enfrentados por Jorge Glas en Ecuador:

Uno de los procesos en los que el exvicepresidente está involucrado es conocido como Reconstrucción de Manabí, donde Glas niega las acusaciones en su contra.

En este caso, Glas y otros coacusados son acusados de peculado, específicamente por el presunto uso indebido de recursos públicos. La Fiscalía sostiene que estos actos ocurrieron durante el periodo en que Glas presidió el Comité para la Reconstrucción y Reactivación Productiva del Empleo, creado tras el terremoto de magnitud 7,8 que afectó la región de Manabí, en el norte de Ecuador, en abril de 2016. Ese mismo año se promulgó la Ley Orgánica de Solidaridad y Corresponsabilidad Ciudadana con el objetivo de reconstruir y reactivar económicamente las áreas costeras afectadas por el terremoto. La Fiscalía ha solicitado que Glas preste declaración en este caso, pero hasta ahora no hay una orden de arresto en su contra relacionada con esta acusación.

Además, es importante señalar que este caso representa solo una parte de las acusaciones que enfrenta Glas. Su situación legal es compleja, con múltiples procesos judiciales y diversas acusaciones, todas las cuales él continúa impugnando vehementemente. El desarrollo de estos casos ha sido objeto de gran atención tanto en Ecuador como internacionalmente, destacando la importancia del caso y sus posibles ramificaciones políticas y legales.

En 2019, la Contraloría General de Ecuador identificó posibles irregularidades en un contrato firmado en marzo de 2017 para la construcción de la carretera Manta-Colisa, de 22 kilómetros de longitud, por un costo superior a los 68 millones de dólares, utilizando recursos de este fondo. La Fiscalía declaró que esta carretera no cumplía con los objetivos establecidos por la Ley de Solidaridad – emergencia, reconstrucción y reactivación – a pesar de lo cual fue contratada.

La fiscal general detalló las bases de esta acusación en una comunicación publicada en X, el 1 de junio de 2023, enfatizando que la priorización de esta carretera se hizo “sin considerar que existían 587 proyectos de reconstrucción de infraestructuras de vivienda pública, salud y educación que requerían atención inmediata después del terremoto”.

En septiembre, la Fiscalía afirmó que estos fondos “no se utilizaron prioritariamente en proyectos relacionados con el contexto del terremoto, es decir, no se destinaron a emergencias ni se dirigieron a las víctimas”.

Posteriormente, la Fiscalía envió una notificación a Glas, pero según informó el fiscal Salazar en el programa Conclusions, Glas presentó un documento que indicaba que su abogado no lo había informado previamente sobre la necesidad de prestar declaración y cambió de representación legal. Sin embargo, según el responsable, “mostró disposición para colaborar”.

A pesar de las afirmaciones del abogado de Glas de que su cliente está siendo “perseguido políticamente”, el fiscal le dijo a CNN que el exvicepresidente “no está siendo objeto de persecución política, porque… la cuestión jurídica se resolvió por los jueces basándose en las pruebas presentadas por la Fiscalía en el tribunal”.

Sobre este tema, la abogada internacional de Glas, Sonia Vera García, negó la culpabilidad del exvicepresidente, afirmando que aunque formaba parte de una comisión “sin autoridad para asignar fondos”, fue implicado en esta investigación.

“Esto plantea interrogantes sobre las motivaciones detrás de su acusación y la falta de pruebas concretas en su contra”, dijo Vera García en un comunicado enviado a CNN.

En respuesta a la persistencia de la Fiscalía, el juez nacional Luis Rivera programó una audiencia para el 5 de enero para formalizar las acusaciones contra Glas por el presunto peculado en el caso de Reconstrucción de Manabí.

Respecto a la ratificación de las sentencias, desde 2017, Glas estaba cumpliendo condena por las condenas por asociación ilícita y soborno agravado. El 28 de noviembre de 2022, un juez aceptó una solicitud de hábeas corpus basada en cuestiones médicas y de seguridad, resultando en la liberación provisional del exvicepresidente de la cárcel.

En 2022, el gobierno expresó preocupación por la posibilidad de fuga de Glas, pero su abogado en ese momento, Edison Loayza, afirmó que su cliente no tenía intenciones de abandonar el país.

Sin embargo, esta semana, el Tribunal Constitucional de Ecuador confirmó las decisiones anteriores relacionadas con Glas, argumentando que los recursos de hábeas corpus presentados por su abogado violaban el debido proceso, la seguridad jurídica, la naturaleza del hábeas corpus y la competencia de las funciones en el sistema judicial.

El fiscal Salazar informó a CNN el 19 de diciembre que 60 personas, incluido Glas, se beneficiaron de la decisión de liberación del juez Emerson Curipallo y que este “distorsionó la figura del hábeas corpus”.

Eduardo Franco Loor, abogado de Glas, expresó en Conclusions su preocupación por la integridad de su cliente.